La exhibición “El encanto de Dresde” reúne algunos de los paisajes monumentales que pintó Bellotto y que sirvieron para reconstruir la ciudad tras el bombardeo en la Segunda Guerra Mundial
A partir del 10 de febrero, visitar el museo Kimbell será como hacer dos viajes: uno a Dresde, Alemania, y otro hacia el siglo XVIII. La exhibición “El encanto de Dresde: Bellotto en la Corte de Saxony” reúne los más importantes paisajes monumentales pintados por Bernardo Belloto durante su estancia en esa ciudad sajona.
También conocido como Canaletto el joven (su tío fue el famoso paisajista urbano Canaletto), Bellotto contribuyó a hacer realidad la idea de Federico Augusto II, príncipe elector de Saxony, de convertir a Dresde en una capital cultural y referencia arquitectónica de Europa.
“Desde la orilla derecho del Elba” y “Por encima del Puente Augusto” son dos de las obras que se exhibirán en esta muestra temporal en el Kimbell Art Museum, ubicado en Fort Worth, Texas. Los paisajes provienen de la Galería Gemälde, propiedad de la Colección de Arte Estatal de Dresde.
Estas obras de Bellotto tienen la virtud de ser al mismo tiempo arte y testimonio histórico. En cuanto a su calidad pictórica cabe destacar la fascinación por los detalles al momento de reproducir tanto los edificios como los personajes que habitaron Dresde en el siglo XVIII. En total, Bellotto produjo 14 vistas de la ciudad con tanta precisión que a menudo se le concede calidad de realismo fotográfico.
Justo esta cualidad en sus paisajes lo convertirían en fuente para salvar a la ciudad del olvido y la destrucción en el siglo XX. Dresde fue uno de los últimos objetivos de los aliados durante la Segunda Guerra Mundial. La bombardearon durante cuatro días bajo el argumento de que era un punto militarmente estratégico, aunque la consecuencia fue la destrucción casi absoluta del centro histórico de la ciudad.
Poco a poco, los dresdenianos han reconstruido algunos de los edificios más emblemáticos con base en los paisajes de Bellotto, sin embargo, muchos otros lugares no se pudieron recuperar.
De modo que los visitantes a la exposición “El encanto de Dresde” no sólo estarán ante una obra de arte sino ante el documento histórico que da cuenta de una ciudad que existió hace dos siglos.
Al anunciar la muestra, el museo explicó a través de un comunicado: “En el transcurso de una década, Bellotto produjo decenas de impresionantes representaciones de la ciudad y sus alrededores. Después del éxito y renombre que ganó con estos grandes trabajos monumentales, Belloto obtuvo otras comisiones en las cortes prominentes de Europa”.
Además de los paisajes de Bellotto, la exhibición se compone de retratos de Federico Augusto II. También hay algunas pinturas sobre Venecia, obra de Antonio Canaletto, tío y maestro del propio Bellotto así como de Alexander Thiele, otro de los pintores de la corte de Dresde. La muestra terminará el 28 de abril.
El museo Kimbell tiene, además, dos exhibiciones especiales temporales. Una está dedicada a Monet y se trata de 52 pinturas de la fase final de la carrera del pintor, básicamente fechadas 1913 a 1926. La otra es sobre Renoir y se llama “El cuerpo, los sentidos”. Es la mayor exhibición de obras de Pierre-August Renoir centradas en las formas del cuerpo.
De esta manera, el museo Kimbell cumple con el espíritu con que fue creado ya que se trata de una institución que no cuenta con apoyo de fondos federales ni locales. Por el contrario, desde su creación se ha apoyado en la sociedad civil y sus exhibiciones significan un logro para los ciudadanos de Fort Worth, quienes saben que aportar cultura a la ciudad es una forma de generar una mejor sociedad.