Por Verónica Villegas
Buenas noticias para quienes gustan del ecoturismo y del colorido y majestuosidad que produce la llegada de millones de “Mariposas Monarca”, como cada año a los santuarios ubicados en el estado de Michoacán, porque el Gobierno del Estado y la Secretaría de Turismo de esa entidad anunciaron que estarán abiertos al público en general.
Las autoridades michoacanas precisaron que a partir del sábado 28 de noviembre, bajo estrictas medidas sanitarias y cumpliendo todos los protocolos, se abrirán al público los Santuarios de la Mariposa Monarca ubicados en el ejido El Rosario, ubicado en el municipio de Ocampo; Sierra Chincua, municipio de Angangueo, y Senguio, municipio del mismo nombre, en el estado de Michoacán.
Debido a la actual situación por el COVID-19, en esta temporada de hibernación 2020-2021 la visita a los santuarios se realizará bajo estrictas medidas de seguridad e higiene, que deberán atender todos los turistas y los prestadores de servicios, con el propósito de ofrecer una estancia segura y responsable.
Para ello, actualmente los prestadores de servicios turísticos locales se encuentran en proceso de capacitación sobre el manejo e implementación de los protocolos sanitarios, así como del mantenimiento de las instalaciones y la colocación de la señalización, lo que se hace con apoyo de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Como cada año las mariposas monarca iniciaron su largo recorrido de más de 4 mil kilómetros desde el sur de Canadá, cruzando Estados Unidos y el norte de México, hasta llega a sus refugios de invierno en los estados de México y Michoacán.
La Sectur de Michoacán recordó que se puede observar su llegada a los Santuarios de hibernación en la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca, en Michoacán, pero también en el Área de Protección de Recursos Naturales Valle de Bravo, Tilostoc, Temascaltepec, Malacatepec y Área de Protección Flora y Fauna Nevado de Toluca, Estado de México.
La Secretaría de Turismo de Michoacán recordó que este extraordinario fenómeno migratorio por su “Valor Universal Excepcional”, fue designado en el año 2008 como Patrimonio Mundial de la Humanidad.
